[ Portada 2008 ]

Hipismo
Sicótico acabó la sequía
José Rubicco Huertas
 EL UNIVERSAL

El potro dominicano le dio el primer triunfo a su país en el Clásico del Caribe


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Se necesitaron 41 ediciones para que un ejemplar nacido en República Dominicana lograra un triunfo en la magna prueba. Ayer, se terminó el maleficio. 

En fulminante avance en los metros finales, el tresañero y campeón quisqueyano Sicótico demostró su clase corredora para vencer a los rivales que le salieron al paso en el Clásico del Caribe, prueba central de la Serie Hípica celebrada durante el fin de semana en el hipódromo Camarero, en la localidad de Canóvanas, Puerto Rico. 

Con la conducción del dominicano Joel Rosario, Sicótico enfiló con energías en la recta decisiva para quebrar la resistencia de la boricua Defensora y pasar a ganar el derby caribeño.



En la competencia, el caballo venezolano Rey Angelo, pupilo de Ricardo D'Angelo, sólo pudo lograr el quinto lugar. 

Sicótico, que empleó tiempo de 112"2 para el recorrido de 1.800 metros, contuvo el empuje postrero del puertorriqueño Cristal de Oro en los 25 metros finales, que arribó segundo. Defensora fue relegada al tercero y el mexicano Antares terminó cuarto. 

"Estamos de celebración. Me siento bien contento por este gran triunfo para mí y nuestro país", expresó Rosario luego de trasponer la meta, mientras era felicitado por algunos aficionados dominicanos que se dieron cita en el óvalo Camarero.



Mientras, el entrenador Eugenio Deschamps sostuvo que la delegación y los dominicanos estaban "felices por el gran triunfo y dedico la victoria a todo nuestro pueblo". 

Sicótico accionó lejos en las primeras de cambio, mientras que la jamaiquina Alsafra y el mexicano Antares realizaron el desgaste en los primeros metros, pero más tarde sucumbieron ante el avance de Defensora y luego de Sicótico, que terminó al tope de la pizarra. 

La prueba se corrió en parciales de 24"2, 48"1, 72"3 y 98"1, con remate de 14"1. 

Sicótico respondió a sus pergaminos como uno de los favoritos, pues en su país ganó 16 de 17 carreras, incluidas varias con margen superior a los 30 y 40 cuerpos. Además, se convirtió en el séptimo ejemplar triplecoronado que gana el Clásico del Caribe, con bolsa de $300 mil. 

Unas 20 mil personas se dieron cita en el óvalo boricua, que montó el evento por octavo año consecutivo.



José Rubicco Huertas
 EL UNIVERSAL